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  • Foto del escritorArancha HM

ARTÍCULO DE OPINIÓN| El caso de Castilla-La Mancha Media

La actual sociedad de medios está pasando por una etapa un tanto convulsa. Sus audiencias e ingresos se están viendo disminuidos de una fuerte manera.


Por lo general, todo el periodismo está en crisis, tanto los medios enfocados al papel como las televisiones. La crisis económica del año 2008 y el auge de Internet ha hecho que se agrave en cierta medida esta situación


En el caso español, estos problemas se están cristalizando en mayor medida en las televisiones públicas autonómicas, como es el caso de Castilla-La Mancha Media.


Logotipo Castilla-La Mancha Media

¿A qué se deben estos problemas y por qué hay una caída en picado de estos medios de comunicación? El principal problema que tienen las televisiones públicas es un obstáculo del contenido ofertado. En el caso de la televisión manchega el contenido que ofrece tiende a ser para las personas mayores. Entre sus contenidos se trata el mundo taurino, la caza, la pesca, el campo, entre otras. Es cierto que Castilla-La Mancha es una comunidad rural, con una gran superficie de campo y que sus actividades económicas principales están enfocadas en este aspecto. En el ámbito de entretenimiento, su programación va dirigida a personas de la tercera edad, tanto los programas de ocio y entretenimiento, como las películas que emite. Estos contenidos conllevan a que la gente joven quede algo apartada a la hora de ver este canal. Aunque este problema no lo tienen todas las televisiones autonómicas.


Otro de los problemas que tienen tras sí las televisiones públicas autonómicas es el de la politización y dependencia, ya que en gran medida dependen del partido político que esté en el Gobierno. Este aspecto enlaza la caída de la credibilidad y por lo tanto una caída de la audiencia, lo que conlleva a un número menor de ingresos, teniendo así un problema de financiación. De la mano del problema de la financiación aparecen los anuncios, una fuente de ingresos y con la que no todos los espectadores están de acuerdo. Si se suprimiese esta forma de recibir ingresos, deberían financiarse mediante un canon directo, lo que haría que la crisis de los medios se encareciera.


Para evitar o no agravar estos problemas se dan estas posibles soluciones, algunas de ellas ya se han visto materializadas en algunos medios. La solución más drástica es el cierre del canal, como en el caso de Canal Nou, debido a una mala gestión del medio. Otros muchos medios han optado por privatizar su cadena para así tener una gestión directa, una externalización de los contenidos o directamente poner el medio en venta, pero todas estas medidas acaban con la pérdida del concepto de servicio público. Otra medida por la que se puede optar es la centralización de los contenidos, es decir, que la televisión pública produzca los mismo contenidos para todo el territorio español.


Estas soluciones dejan apartadas las ventajas que tiene la televisión pública autonómica. Como por ejemplo, se dejaría sin cubrir el contenido local y próximo de nuestro entorno, solo se hablaría de él cuando se produzca un suceso noticioso. Este contenido no lo cubren otras cadenas ni públicas, ni privadas, únicamente las autonómicas de servicio público. Se perderían además, buenas producciones autonómicas que realizan los medios, como es el caso de TV3 en Cataluña. Los medios autonómicos generan unas identidades culturales a las personas de esa área geográfica que otros medios no podrían cubrir.


La externalización del producto sería una de las posibles soluciones que harían que el medio obtuviera un aumento de audiencia y de feedback. El problema de algunos medios de comunicación autonómicos es la línea tradicional que tienen y que sigue intacta durante muchos años. La externalización les ayudaría a obtener nuevas audiencias además de seguir con las que actualmente ya tienen. Las ventajas de este proceso son variadas, ya que se apoya el sector audiovisual independiente. Asimismo, facilita el ahorro de costes a través de coproducciones, agilizando, de esta manera, los problemas de financiación en los que muchos medios regionales se ven envueltos. Con esta medida, los medios se aseguran que la televisión se centre en la producción de los contenidos referidos al servicio público, que sean contenidos abiertos y variados.


No hay que olvidar las desventajas que esto puede acarrear como llevar a cabo una privatización encubierta que puede desembocar en problemas legales. No hay que olvidar que las televisiones autonómicas son las únicas que consumen productos locales, esto genera una dependencia del medio a su significado. Las empresas externas pueden ayudar a realzar el producto pero sin perder la esencia de este.


Estas medidas pueden hacer que los medios autonómicos crezcan en gran medida, pero no han de dejar de lado las redes sociales y las plataformas digitales, que son las que incitan al espectador a ver el canal. Ofertando el contenido en redes sociales, se puede llegar al público más joven, pero para llegar a este gran sector, es necesario que la oferta televisiva cambie y se enfoque, también, en los más jóvenes.


La mayoría de los niños y jóvenes pasan de largo los canales autonómicos por no verse incluidos en la programación, si empiezan a pasar del contenido de entretenimiento, a la larga dejaran de interesarse también por el contenido informativo, que es más concreto de la zona y tiene un gran valor regional, ya que los temas provinciales y locales no son mencionados por las televisiones públicas de nivel estatal.


En conclusión, para obtener un aumento de audiencia y de ingresos, para empezar los medios autonómicos deben hacer un contenido más variado enfocado a todo tipo de públicos de distintas edades. Además deben alejar de sus informativos la politización en los que algunos se ven envueltos, ya que al obtener presupuesto del gobierno, tienden a favorecer al partido político que en ese momento está en el cargo. Con esto no quiero decir que dejen de dar información sobre ese partido político, sino que al hablar de él, y de los demás partidos, se haga de una forma crítica y objetiva. La tendencia de algunas televisiones públicas a favorecer un partido político hace que se pierda la credibilidad en el medio, pero además en el periodismo en general.


En el caso de Castilla-La Mancha deberían enfocar menos sus contenidos en el perfil de hombre de elevada edad, en los contenidos que esto se ve reflejado son en los programas taurinos, de caza y de campo. La otra parte de sus contenidos está dirigido a mujer también mayor, con los programas de corazón de por la tarde. Además las películas que se ofertan tienden a ser viejas, con por lo menos 20 o 30 años de antigüedad como mínimo. Estas características, hacen que evidentemente, los jóvenes no se sientan incluidos ni atraídos por el material que se produce.


Desde mi punto de vista y en mi propio caso, a mí solo me resulta atractivo de Castilla-La Mancha Media las noticias del mediodía por su carácter regional y por poder saber mejor que hechos noticiosos rodean nuestras tierras. A pesar de que Televisión Española oferta después de su informativo de mediodía, noticias regionales no llegan a profundizar en los contenidos tanto como lo hacen las noticias de mediodía y de noche de Castilla-La Mancha.

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